Como agrupación habían advertido a principios de octubre –ante la opinión pública en general, ante los docentes y ante el CGE– “sobre las condiciones en las que se realizaba la oposición para secretarios, sobre lo ajustado del cronograma y la falta de inversión en un sistema informático que no está preparado para trabajar sobre concursos que se desarrollen en simultáneo. También advertimos que la mecánica había sido definida por una comisión que no extendió el debate ni a los miembros de Jurado de Concursos ni a las asambleas en las escuelas”, apuntaron.
“Lamentablemente teníamos razón, también en que los derechos de los trabajadores a la estabilidad fueron forzados a los tiempos electorales que se vivían en aquellos meses”, afirmaron y exigieron al Gobierno “que solucione estos problemas, reclamamos por procesos concursales que no se basen en la improvisación y el apuro, sino en la participación y en las condiciones necesarias para su normal desarrollo y destacamos la fortaleza de los docentes que han atendido estas advertencias y señalado de forma insistente los errores que el proceso mostró”.
Fuente: AIM.
