“Fue una desgracia con suerte. Mi papá y yo seguimos un poco doloridos. Estamos haciendo reposo y estoy con cuello ortopédico por seguridad”, expresó el Pope sobre el vuelco que sufrieron ambos junto a su hermano Nicolás en el kilómetro 539 de la Ruta 14 a la altura de Paso de los Libres, Corrientes.
Por otra parte, contó los detalles de la maniobra y dijo que su hermano regresó antes a La Histórica porque no había lugar en el hospital.
El uruguayense Próspero Bonelli recibió el alta junto a su padre –también llamado Próspero– luego de haber permanecido en observación en Paso de los Libres, Corrientes, donde sufrieron el vuelco al regresar de la quinta fecha del TC, disputada en el autódromo Rosamonte de Posadas, Misiones.
“Fue una desgracia con suerte. Mi papá y yo seguimos un poco doloridos. Estamos haciendo reposo y estoy con cuello ortopédico por seguridad”, contó el piloto de Chevrolet.
El piloto que sufrió el siniestro vial a la altura del kilómetro 539 de la ruta 14 amplió sus declaraciones en una entrevista con Carburando: “Estamos bien. Recién acabo de llegar a casa, hoy a la mañana me dieron el alta. Fuimos al lugar donde estaba el auto, arreglamos todos los papeles, arreglamos con el seguro. Cuando llegué acá ya tenía un turno para hacer una tomografía computada de la cervical que me dolía y mandé los resultados; me duele un poco pero aparentemente no hay nada grave”.
Al contar los detalles del accidente, Próspero comentó: “Venía manejando mi papá y venía un auto de frente, viste cuando uno viene pegado atrás de uno y tiende a mirar, volanteó; cuando salió él es como que volanteó y alcanzó a morder la banquina. Ahí justo hay banquina que no es de cemento, había barro y cuando lo agarramos el auto se puso de costado; apuntamos para los autos de frente y por suerte volanteó para el otro lado y salimos para la banquina. Llegamos a volcar, una vuelta dimos seguro, no sé si más o no”.
Luego del accidente, Próspero y su papá quedaron en observación y Nicolás el domingo a la noche retornó hacia La Histórica: “Nicolás se vino porque en el hospital no había lugar, teníamos que salir a buscar y ya era tarde y los chicos del equipo estaban con la camioneta, así que Nico se vino”.
Por último, sobre el estado actual de su padre, Próspero Bonelli señaló: “Mi papá está bien, al principio nos había asustado un poco más él, como que le dolía mucho más a él. Cuando llegamos anoche al sanatorio como que no podía caminar y nos habíamos asustado pero hoy amaneció bien y yo al contrario, un poco más dolorido. En cuanto al auto, el golpe está más del lado del acompañante, es donde más se aplastó el techo y por eso llevé la peor parte”.
