La niña fue operada de las lesiones en su rostro, y ahora los médicos solo se esperan que transcurra el tiempo, para evaluar la posibilidad de cumplir con otras intervenciones de reconstrucción.
El hecho que conmocionó a Urdinarrain ocurrió el pasado lunes, en horas de la tarde, cuando la niña de apenas dos años jugaba en la casa de una vecina. Según se informó, la pequeña visitaba habitualmente el lugar, y habría sido desconocida por el animal que se encontraba atado.