Sin embargo, desde la última semana de diciembre y el arranque de 2023 esto empeoró e impactó al sector de cultivos que pasó de intermedia a mala. "Los informes de las cámaras de granos situaban a Gualeguaychú como una de las zonas donde todavía existía un cierto potencial de acercarnos a rindes de un 80 por ciento. Pero, en los últimos días esto se revirtió significativamente", puntualizó el ruralista.
Sergio Dalcol describió el panorama como "crítico porque hay siembras de maíz y soja que ya se están perdiendo y le sumamos los problemas de la ganadería por el incremento de costos a raíz de medidas tomadas por el Gobierno como el dólar soja -que beneficia a parte del sector y perjudica a otro-".
Si bien reconoció que la sequía es generalizada porque "ya se perdieron rindes en Santa Fe, Córdoba y el norte de la provincia de Buenos Aires", Dalcol subrayó que "las pérdidas económicas van a ser significativas. Si había una expectativa de rindes de 100, en el mejor de los casos, será de 40".
El paso siguiente sería "el quebranto, porque la gente no va a poder pagar, sobre todo, el que se endeudó para sembrar y resolver eso será un problema".
"Cuando el sector se queja mucho porque el Estado mete demasiado la mano en el bolsillo, hay obras de infraestructura que el productor podría hacer para mitigar estos eventos como mejorar la cantidad y capacidad de las aguadas o poner electrobombeadores. Lamentablemente,el productor apenas subsiste y por ende no se invierte", detalló el presidente de la Sociedad Rural.
Dalcol mantiene su escepticismo sobre un clima más llovedor. "Como lo dicen los expertos meteorólogos, a partir del otoño se podría revertir pero la realidad es que no se avizora un cambio climático inmediato", finalizó ante R2820.