Asimismo, precisó que, hasta el momento, “no hay indicios de presencia del virus de hantavirus” en los cuerpos de las dos primas de 10 y 13 años, que vivían a solo 100 metros de distancia.
Ambos decesos según la autopsia se produjeron por “un problema neurológico con un aumento de la presión intracraneana, que derivó en una hemorragia cerebral, desencadenando un edema pulmonar y paro cardiorrespiratorio".
La Dirección Provincial de Epidemiología realizó, desde este miércoles, un abordaje socio ambiental en el barrio de la ciudad de Nogoyá donde vivían las primas a raíz de otros tres casos con síntomas coincidentes con las muertes.
Las tareas de relevamiento fueron acordadas con las áreas de Salud y Desarrollo Social del Municipio y se concretan en conjunto, tras la derivación de otros tres bebés a Paraná.
En tanto, en un parte médico emitido por el Hospital Materno Infantil San Roque se informó que los pacientes pediátricos permanecen internados.
"Los tres se encuentran estables bajo estricto cuidado y control de los profesionales de la salud, y por ahora en la misma sala", afirmó Marcelo Itharte, director del nosocomio, en dicho parte médico.