Están acusados de contrabandear un helicóptero, falsificar su matrícula y de conformar una asociación ilícita para la evasión de Alvarado, condenado a prisión perpetúa en varias causas.
Los tres son considerados coautor de los delitos de “contrabando de importación agravado por la cantidad de intervinientes, el medio de transporte aéreo y el lugar de aterrizaje empleados y por el valor del bien ingresado; favorecimiento de evasión en grado de tentativa; y falsificación y supresión de la numeración de un objeto registrado de acuerdo a la ley”.
En diálogo con R2820, Fabián Otarán, abogado defensor de Andrés Donnet, anticipó que trabaja para conseguir un arresto domiciliario en Gualeguaychú y que apelará el procesamiento de la Justica Federal. "No tiene ninguna vinculación con estos mafiosos", subrayó.
"El procesamiento es una etapa más del proceso federal. Primero se necesita sospecha para llamar a declarar a una persona ante el juez. Mi cliente ofreció una respuesta que al juez no le basto y decidió procesarlo ya que entiende que las respuestas que dio Donnet son insuficientes y va a seguir investigándolo", explicó.
"Vamos a pelear la medida del juez Ernesto Kreplak porque entendemos que para procesar a una persona se necesita semi plena prueba y no hay tal nivel de prueba. No hay nada que pruebe que Andrés Donnet conozca a estos mafiosos que son criminales con antecedentes graves. No hay ninguna vinculación con ellos. El juez tomó una medida preventiva para mantenerlo en cautela durante los cuatro meses de tiempo que tiene para desarrollar esta investigación".
Otarán explicó a R2820 que Donnet está detenido "en el penal de Marcos Paz. Por otro lado, se está instruyendo un informen ambiental para pedir la posibilidad de un arresto domiciliario por que toda persona inocente antes de una sentencia condenatoria y es abuso de derechos tratar a un inocente como culpable y darle un anticipo de pena".
Donnet, de 40 años, vive en Gualeguaychú y su profesión es piloto fumigador. La actividad la realiza desde un campo a la vera de la ruta nacional 136, en Costa Uruguay Norte, donde tiene un "hangar y una pista habilitada como Lugar Aereo Denunciado" que está registrado ante la autoridad de aviación, es decir, ANAC, para el despegue y aterrizaje de avionetas de pulverización agrícola.
"Un conocido de su padre le pidió que alojara durante 40 días en su hangar un helicóptero que se usaría con fines recreativos. El derecho de hangarar es un derecho que tiene cualquier persona y no se necesita un permiso especial", explicó Otarán y contradijo la declaración de la jefa del Aeródromo, Marcela Gorosito.
Esa "declaración complicó la situación de mi defendido porque dijo que es una pista clandestina y que no lo conocía, a pesar que es una persona que hace 30 años que vive se dedica a eso. Nosotros pudimos conseguir gente más experimentada y ex directivos del Aero que certificaorn que existe la pista registrada con el número 5133 de la lista LAD de la Región Centro. La información se presentó al juez, pero llego tarde ya que la decisión de procesarlo estaba tomada".
Otros dos puntos de la investigación judicial que complican a Andrés Donnet son "los seguimientos de la Policía Federal que lo situán en el mismo hangar donde estaba el helicóptero y la aparición de un arma de fuego", detalló Otarán.
Al respecto, hay dos versiones sobre esa arma: para la defensa "la tiene hace 30 años y él no sabe si funciona porque nunca se animó a tirar. La tenía guardada su padre". En tanto, la Justicia descubrió que sería una pistola que perdió un agente policial de Entre Ríos, en 1996, en el Corsódromo y por alguna razón llegó hasta Donnet.
Sobre el ploteo del helicóptero y el cambio de una matrícula extranjera por una nacional, Otarán sostiene que "mi cliente no tiene nada que ver. No participó de esa situación y tampoco le llamó la atención porque es algo que se suele hacer en la aviación cuando se trae una aeronave desde el exterior".
Recordemos que ese aparato fue comprado en España por unos 200 mil dólares y traído a Paraguay donde fue armado. De allí voló hasta Gualeguaychú, para esperar el momento indicado de rescatar al narco Lindor Alvarado y concretar la fuga del penal de Ezeiza, pero eso no sucedió porque las escuchas telefónicas y un testigo de identidad reservada descubrieron el cinematográfico intento de escape.