El atleta paranaense, que había sido noticia porque vendió empanadas para poder correr una carrera, con un tiempo de 29.31 minutos, se coronó como ganador del Maratón de Reyes.
Julián Molina, fue el entrerriano que vendió empanadas para correr en una carrera internacional de Buenos Aires y se coronó campeón argentino. Su historia recorrió los medios del mundo en 2018.
Emocionado, dijo, tras ganar la carrera: "Hoy ha cambiado el apellido del Maratón de Reyes, Julián Molina es el ganador" y aclaró: "Aunque viva en Rosario ahora, por algunas cuestiones, soy bien entrerriano".
El segundo lugar fue para el concordiense Federico Bruno, que tenía como objetivo ganar por sexta vez consecutiva la carrera pero no pudo. Martín Méndez, otro de los concordienses que estaba entre los favoritos, llegó en el tercer lugar.
En mujeres, la cordobesa Rosa Godoy fue la ganadora, en segundo lugar llegó María Ovejero, de Banda del Río Salí y Patricia Ponce llegó en tercer lugar. Lejos, en el quinto lugar llegó la concordiense Nancy Gallo.
Fuente: El Entre Ríos