El objetivo de la misiva entregada al Estado Nacional fue el de dar a conocer y ratificar la posición del sector porcino respecto de la llegada de las inversiones Chinas y proponer alternativas de mejora para dicha iniciativa.
El eje central de la proposición remarca que las inversiones en la cadena porcina se materialicen a través de instrumentos financieros de capital extranjero que tengan como destino, el financiamiento de proyectos de productores nacionales en lugar de impulsar asociaciones entre inversores extranjeros y empresas locales.
En segundo lugar ratifica la importancia de la protección del estatus sanitario que Argentina ha alcanzado en producción porcina, y se rechaza de plano, la posibilidad de ingreso de animales desde el país asiático o de países que no se encuentren habilitados actualmente o que, estando habilitados, posean enfermedades en su rodeo que aquí no existen.
Seguidamente, se solicita la garantía en cuanto al destino de la carne producida por los proyectos a financiar. Estos deberán tener como mercado objetivo a China y estar basados en compromisos comerciales de largo plazo.
Por último, la carta propone la creación de un Consejo Público-Privado para el seguimiento del dicho acuerdo, que vele por la correcta utilización de los instrumentos financieros, la ejecución de los proyectos y el cumplimiento de los compromisos asumidos en torno a los mismos.
Con el claro objetivo de proteger el patrimonio productivo porcino y a los fines de transmitir las principales inquietudes de sus representados, las entidades miembro de la Federación de Argentina de Productores de Porcinos envian esta misiva al Estado Nacional.
