Si bien las últimas lluvias ayudaron a mitigar las quemas, el agua no llegó al fondo, donde debajo de la superficie isleña es “todo combustible”, describió Gonzalo Ratner, subdirector del área a cargo de la ciudad santafesina.
Las imágenes satelitales divulgadas donde pueden verse que han desaparecido los puntos rojos que marcaban los incendios en el Delta del Paraná pueden ser engañosas. En las islas, todo es distinto.
“Ya nos ha pasado otras veces, de tener lluvias y tener focos activos, porque las imágenes satelitales no muestran los puntos calientes (que hay debajo). Pero levanta un poco la temperatura y enseguida aparecen nuevos focos. Es por la condición del terreno. No es en todos los lugares, pero hay sectores donde a medida que hay crecientes y bajantes (del río) se va juntando sedimentos y va quedando vegetación seca debajo. Bueno, esas distintas capas por ahí soportan sin humedecerse por las lluvias y van quedando ‘puntos calientes’, como le dicen los brigadistas, y eso es lo que se está repasando con vuelos” para identificarlos, explicó Ratner sobre los trabajos que se llevaron adelante en la zona de islas de Victoria.
De este modo, el segundo a cargo de Defensa Civil de Rosario, comento que no bajan la guardia ante la amenaza de las quemas en estos humedales.
En su momento más crítico, señaló el combate del fuego llegó a demandar el accionar de más de un centenar de personas, entre bomberos y policías de Entre Ríos y Santa Fe, junto con guardaparques que llegaron incluso desde el sur del país, así como brigadistas del Plan Nacional de Manejo del Fuego. También disponer de aviones hidrantes, helicópteros y embarcaciones para el traslado.
Ahora, una guardia de 70 brigadistas permanece atenta al relevamiento aéreo de estos puntos calientes para poder darles la estocada final. “Donde aparece algo sospechoso se remueve el terreno”, dice Ratner sobre la metodología utilizada para disipar definitivamente la posibilidad de generar una quemazón. “Sale el calor y se termina de extinguir el foco, porque si no se puede reactivar”, adviritó.
“Llovió bastante, varios días, y en situaciones normales, en otras superficies, se podría decir que se terminó el fuego, pero acá en zona de islas es muy complicado. Las lagunas están todas secas y ese fondo es todo combustible; esa es la complicación a diferencia de otros incendios de pastizales. En las isla se presenta esa dificultad que la altas temperaturas están escondidas debajo de las primeras capas de terrenos. Si eso se deja y si no se revisa, eso se reactiva”.
Fuente: ERA Verde
