El destino de este oriental, nacido en Montevideo el 8 de diciembre de 1961, hijo de un gualeguaychuense de idéntico nombre y descendiente de italianos que llegaron a Rosario, a comienzos del siglo pasado, estuvo siempre ligado a Gualeguaychú, “mi lugar en el mundo”, como repite a menudo.

Y vaya si retribuyó su amor por la ciudad. Es el único entrenador de básquetbol de la historia que, dirigiendo un seleccionado local, salió campeón provincial de cadetes, juveniles y mayores.

Una triple corona que fue siempre muy esquiva y que, desde 1951, nunca nadie logró y eso que en esta tierra del sur entrerriano dirigieron Narciso Luis Comeres, Arturo Casanova, Antonio Giusto, Adán Otero, Daniel “Quesito” Rodríguez o Mario Arturo Viviani, por citar sólo a algunos de los que fueron los más trascendentes de las tres primeras décadas de nuestro básquetbol.

En 12 años de trabajo en Central Entrerriano, Racing Club y Neptunia, Cordatti se dio el gusto de entrar al “Salón de la Fama” al consagrarse campeón provincial con la selección de cadetes, en 2002 en Concepción del Uruguay, al vencer a Paraná en la final; con los juveniles, en 2005, en Santa Elena y de mayores, luego de 60 años !!! al coronarse en Concordia en 2014, superando al favorito Santa Elena por 86 a 82, en tiempo suplementario, tras igualar en 72 en los 40 reglamentarios con un triple sobre la chicharra de Matías Novello, que fue una de las figuras del combinado local.

El logro obtenido, muy difícil de empardar, tiene un significado extraordinario, debido a que la categoría juvenil, desde 1969 en que se jugó la primera edición del Entrerriano de Selecciones, sólo ganó dos títulos, el primero de la mano de Mario Rodríguez, en 2001 en Santa Elena.

Si a este detalle no menor le sumamos las seis décadas que pasaron desde el tercer título provincial, obtenido en 1954 en la cancha abierta de Central Entrerriano, llegaremos a la conclusión que esta trilogía de éxitos alcanzada por Cordatti difícilmente sea superada o igualada.

Históricamente, la Federación Entrerriana organizaba los provinciales en Infantiles, Cadetes, Juveniles y Mayores, pero a partir de 1990 los torneos comenzaron a perder interés, a tal punto que el Entrerriano de Mayores dejó de jugarse por más de una década.

La creación de nuevas categorías, la nueva estructura de los certámenes de la CABB y la Asociación de Clubes, contribuyó para que se perdiera la tradición de los provinciales, hasta que la dirigencia de la FEBER los fue recuperando, afortunadamente.

Cordatti llegó en 2000 para trabajar en las formativas de Central Entrerriano, cuando el plantel profesional era conducido por Javier Espíndola en el Torneo Nacional de Ascenso y allí comenzó a formar a varios jugadores que muy pronto comenzaron a destacarse y que fueron la base del seleccionado de cadetes, que ganó el título en Concepción del Uruguay, derrotando nada menos que a Paraná, en la final.

Emmanuel Riolfo, Bruno Chareun, Pablo Bacigalupo, Lucas Rodríguez, Ramiro Capello, Guillermo Carrozo, Leonardo Villagra, Nicolás Luna, Fabricio Delcause, Adhemar Watters, Juan Pablo Castillo y Félix Figún, conformaron ese plantel.

Tres años más tarde, fue designado al frente del juvenil y esta vez optó por Aitor Aramburu, Rodrigo Uccelli, García, Juan Gondell, Benedetti, Sebastián Vega, Gabriel Meriano, Leonardo Villagra, Lucas Rodríguez, José Luis Melchiori, Agustín Meriano y Emiliano Arce, quienes se coronaron en Santa Elena.

Y tuvo la gran oportunidad con los mayores. En 2014, en compañía de Nicolás Scheppens, se hizo cargo del combinado, que debió jugar primero la eliminatoria con Concepción del Uruguay, al cual venció en los dos partidos, accediendo a la Final Four que tuvo por escenario a Concordia.

El sábado 5 de julio, en el primer juego, despachó a los local, con la base de Estudiantes por 78 a 70 en tiempo suplementario, tras igualar en 66.

El domingo, por la noche, derrotó al favorito Santa Elena por 86 a 82 también en tiempo suplementario, luego de igualar en 72 en los 40 reglamentarios.

El quinteto inicial estuvo conformado por José Melchiori, Gabriel Meriano, Gabriel Díaz, Diego Bernardi y Juan Cansina. Luego sumaron minutos en cancha Matías Novello (otra vez fue fundamental en el goleo), Pablo Mander, Juan Fumaneri, Lucas Arrate y Manuel Gómez.

El plantel se completó con el experimentado Jorge Recalde y el pivote de Juventud Unida Leonardo Villagra.

Dos años más tarde, luego de eliminar a Santa Elena, volvió a jugar la Final Four, pero esta vez Gualeguaychú no pudo con Villaguay, que le ganó la final 78 a 65, en cancha de Huracán de esa ciudad.

El doblete en mayores, estuvo muy cerca de concretarse…

Cordatti, jugó muchos años en el Metropolitano de Montevideo, vistiendo varias camisetas y se retiró joven, para dirigir a Aguada y Verdirrojo, además de Cordón e Independiente (Mercedes), en la Liga Uruguaya.

Sus cualidades profesionales y humanas, lo llevaron a la presidencia de la ENEFU, la escuela de entrenadores del vecino país, cargo que dejó a fines de enero de este año, porque pensaba viajar a Montemurro, al sur de Italia, para visitar la tierra de su bisabuelo.

La pandemia del coronavirus lo obligó a disfrutar de su Montevideo, aunque cuenta los días para regresar a Gualeguaychú, donde espera volver a entrenar.

Seguramente, para volver a batir algún otro récord. Por ahora, disfruta de una triple corona entrerriana que le envidia todo el básquetbol de Gualeguaychú.

Fuente: Gualeguaychú Deportivo.
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