El director reconoció que fueron momentos de extrema crudeza y dolor los que se vivieron en los galpones papeliteros y le quitó todo manto de especulación a una decisión que calificó como netamente "humanitaria".
"Anoche, Papelitos tomó una decisión que no fue fácil, pero que fue profundamente humana: no salir a desfilar. No fue un capricho ni nada parecido. Fue un acto de respeto hacia quien era parte de esta gran familia y lo seguirá siendo en nuestra memoria.
El dolor y la angustia que vivimos nos atravesaron de una manera que no se puede describir con palabras. La tristeza, la incredulidad, el llanto, la desorientación… No estábamos en condiciones de celebrar cuando un compañero, con su traje y su espíritu listos para desfilar, perdió la vida ante nuestros ojos. Salir hubiera sido traicionar lo que sentimos en lo más profundo de nuestros corazones.
El carnaval es alegría, pero también es comunidad, es amor, es respeto. Hay momentos en los que la humanidad tiene que estar por encima de cualquier otro interés. Este fue uno de esos momentos.
Nuestra decisión no buscó ventajas ni beneficios. No hay nada que pueda compensar la pérdida de una vida. Papelitos se detuvo porque el corazón nos lo pedía, porque antes que una comparsa, somos personas. Y eso es lo que más importa.
Agradecemos el respeto y la comprensión de quienes entendieron el verdadero valor de este gesto. Abrazamos a todos los que, como nosotros, sienten el carnaval en el alma. A quienes entienden que el carnaval es mucho más que un simple desfile", concluyó el texto ilustrado por el logo en blanco y negro de la comparsa del Oeste.
Por su parte, el Club Juventud Unida en su conjunto y los directivos también hicieron llegar su apoyo a la familia de David y colaboraron en el traslado del cuerpo hacia la provincia de Buenos Aires que se concretó durante la madrugada de este domingo.
