Sin dudas, ninguna medida que se instrumente revertirá las pérdidas de una campaña del sector paupérrima, que atraviesa a todas las actividades por igual, pero será necesario que el Gobierno, tanto Provincial y Nacional, asuman que se deben adoptar medidas extraordinarias, que tengan como única premisa sostener a los productores dentro del sector.
Hasta ahora no se han dado respuesta a la altura de la crisis, siguen restricciones para el financiamiento, como lo son las comunicaciones del BCRA, que castigan y discriminan al agricultor, a tal punto que la tasa usuraria, que se le cobra al productor en emergencia o desastre agropecuario es del 93,60 % anual. La AFIP busca hasta el último vestigio para reconocer los certificados de emergencia, solo para postergar los pagos del por ejemplo el impuesto a las ganancias (que no habrá) y cobrando interés, y así podríamos seguir enumerando palos en la rueda, que persisten afectando a todos los productores.
En este marco, la Federación Agraria de Entre Ríos se declara en estado de alerta y movilización, que en primera instancia llevará sus reclamos a la Capital Federal, en marco de las acciones aprobadas a nivel nacional, no descartando en el mes de abril volver a las rutas de Entre Ríos, si no hay respuestas positivas a los reclamos.