En este sentido, se busca organizar y ordenar la ciudad desde diferentes aspectos para disminuir los focos posibilitadores de presencia de todo tipo de plagas (roedores, moscas, cucarachas, entre otros) como así también una manera más de sumar acciones para prevenir el dengue, el zika y la fiebre chikungunya, evitando la reproducción de los mosquitos que transmiten estas enfermedades.
Recordamos que el Dengue es un virus transmitido por el mosquito Aedes aegypti, que prolifera en la ciudad y se reproduce en ambientes húmedos y principalmente en recipientes que acumulan agua: canaletas, neumáticos en desuso, charcos, piletas, floreros, botellas, jarrones, etc.
Es una enfermedad que no tiene tratamiento específico ni vacuna, pero cuya detección temprana y el acceso a la asistencia médica adecuada disminuyen las tasas de afección y mortalidad. La falta de mantenimiento, los altos pastizales, la presencia de recipientes abandonados en terrenos de la ciudad son focos infecciosos que ponen en riesgo la salud de toda la sociedad, por lo que desde Inspección General se exige la inmediata adecuación y en caso de incumplimiento la sanción a través de multas.
De esta manera, personal del área municipal recorre las diferentes calles o barrios, observando las condiciones de los terrenos baldíos, y ante una irregularidad se identifica la persona o propietario, y se labra el acta de: notificación, infracción e intimación de limpieza del terreno, tal como lo establece la ordenanza.
Es responsabilidad del propietario mantener en condiciones el predio, en caso de incumplimiento, el acta de infracción se eleva al juzgado de faltas para su resolución.