Tras el intenso e incesante uso del servicio, los pozos han variado en su rendimiento por lo que se llevaron adelante gestiones del intendente Leonardo Hassell, ante el ENOHSA (Ente Nacional de Obras Hídricas y Saneamiento) y su titular, Enrique Cresto, con resultados positivos, ya que se han podido adquirir nuevas bombas para renovar y optimizar el servicio en general.
El trabajo que se lleva adelante en estos días, consiste en vaciar el pozo y lavarlo, que quede accesible para que los operarios puedan proceder sin consecuencias para su humanidad, en primer término, luego para el servicio.
Es el segundo pozo en el que se están llevando a cabo las tareas, consistentes en cargar su contenido al atmosférico que luego es volcado donde el nivel de la red lo permite, en este caso a dos cuadras. En ese lapso, estimado en 30 minutos aproximadamente, el servicio no se detiene, sigue trabajando, por lo que se debe actuar con celeridad, hasta que retorna el camión y vuelve a cargar. En ese lapso los operarios cambian las llaves de paso, que son dos, y las bombas.
“Es una tarea que optimizará de manera sustancial el servicio, evitará las habituales complicaciones que en algunos sectores suceden”, apuntó Mauricio Krenn, secretario de Gobierno, quien acotó que “se hacía indispensable el recambio de las bombas impulsoras, como todo el trabajo que estamos llevando a cabo en todo el sistema de cloacas de Larroque”.
