Desde el Hospital Centenario y los sanatorios privados ya se está trabajando en esta misma línea.
El dinamismo de la situación epidemiológica en el país obligó a las autoridades sanitarias a buscar alternativas para evitar la propagación del virus y por ello creó un manual con pautas para la adopción de la internación domiciliaria. La medida "nse evaluará en cada paciente en base a la situación clínica, el momento epidemiológico concreto y cuestiones demográficas"
"Los médicos intervinientes ante cada caso deberán constatar la ausencia de comorbilidades en el paciente y en sus convivientes para permitir este tipo de atención. No es necesario que el paciente viva acompañado si se puede asegurar una asistencia y un seguimiento telefónico permanente con el personal sanitario hasta la resolución de los síntomas", explicó el parte de prensa del nosocomio.
Aunque cada caso se deberá valorar de forma individual, como norma general no debería haber convivientes con condiciones de salud que supongan una vulnerabilidad: edad avanzada, enfermedades crónicas, inmunodepresión, embarazo, éstos deberían trasladarse al domicilio de otro familiar mientras dure el aislamiento.
Tanto el paciente como sus convivientes deben ser capaces de comprender y aplicar de forma correcta y consistente las medidas básicas de higiene, prevención y control de la infección. Y se deberá contar con capacidad para realizar una atención y seguimiento domiciliarios, idealmente mediante controles por vía telefónica o presencial cuando se considere necesario.