Nuestro Teatro recibió la semana pasada otra muestra de la alta calidad que han alcanzado las expresiones teatrales en nuestra ciudad.

Y no sólo debemos hablar de calidad, sino de algo valorable cuantitativamente: la diversidad de propuestas. No se trata de un tipo, una especie, de teatro. Vemos crecer artistas en temas de diversa índole.

Ahora nos referiremos a la nueva producción de Benedetti/Fernández, un sello de calidad de por sí: se trata de "Mamá está más chiquita", una obra del género musical, de Ignacio Olivera, con letra y música de Juan Pablo Schapira.

La versión gualeguaychuense puede competir con cualquiera de las que se han dado de esta obra.
EL TEMA
En esencia, se trata de las peripecias de una mamá (Belén Grecco) con dos hijos adolescentes: un varón (Mateo Fiorotto), que prefiere escapar de la realidad viviendo mundos fantásticos; y una señorita (Milagros Fink) que intenta sobrevivir a su madre sobreprotectora, con la ayuda de su novio (Germán Farabello); planean escapar de la casa, en intentos siempre fallidos. quizá también por su propia inseguridad.

La rutina de la casa se altera cuando irrumpe una tía (Adriana Díaz), que viene de algún lejano país.

Los textos nos muestran escenas propias de la realidad del mundo adolescente, con sus curiosidades vitales (en este caso) eludidas por su madre.
LO IMPORTANTE DE LA OBRA
Pero lo importante no está en los textos, sino en el sustento de la propuesta: la preponderancia de la música, presente en la mayor parte de la obra, que permite el lucimiento como cantantes de la ultraconsagrada Belén, y de los muy afinados Milagros y Mateo.

Una banda musical en vivo, y en el escenario, apoya con solvencia y calidez a los cantantes y al desarrollo de la trama: se lucen Gastón Corazzini, en piano, Juane Telechea, en bajo y chelo; y Joel Rodríguez, en la batería.

En papeles un poco menores, pero imprescindibles en el devenir de la obra, aparecen el multiartista Germán Farabello (el novio) y la siempre graciosa Adriana Díaz (la tía).

Me parece que quizá convendría dar un poquito más de volumen a los micrófonos de las voces, porque en las últimas filas parece que se dificulta a veces distinguir el texto, por la potencia de la música. Pero se trataría de un problemita menor, y que quizá ni siquiera sea real: es lo que este comentarista escuchó del público.

UN SALDO ALTAMENTE POSITIVO
Como se dijo antes, Benedetti/Fernández es una marca de calidad reconocida, en el complejo mundo del teatro musical.

Esta producción no hace sino refirmar la profundidad de sus propuestas, que no dejan afuera de su mira la iluminación (realmente notable) y la escenografía, incluyendo a la mamá que se achicó.

Se trata de una obra con textos donde se mezcla alguna parte dramática, con la incomprensión de las necesidades de conocer de los adolescentes, con una música sencillamente gloriosa.

Espero que en todas las futuras funciones, el Teatro tenga el lleno que tuvo hasta ahora. Vale la pena participar de "Mamá está más chiquita".
Crítica teatral
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