El enunciado dice mucho. Muchísimo: Portugal no necesitó de Cristiano Ronaldo para ganar. Tampoco, para meter seis goles. Mucho menos, para clasificarse a cuartos.

Con el Bicho en el banco, liquidó el trámite antes que él entrara, con un triplete de Gonçalo Ramos, el que lo reemplazó. Un tremendo espaldarazo a la decisión del DT de castigar a su máxima estrella por indisciplina. Y un golpe al orgullo de CR7, por segunda vez suplente en un Mundial, por primera vez afuera del 11 de una instancia decisiva.

Como fuera, con este tremendo 6 a 1, los lusos ahora van por Marruecos, que dio el batacazo ante España.

El equipo de Fernando Santos se hizo cargo de la ausencia de su gran figura con autoridad. Y para eso, contó con un partido inolvidable de Ramos.

El compañero de Ota y de Enzo en Benfica, de sólo 21 años, arrancó su noche con un terrible fierrazo que el arquero suizo ni siquiera llegó a ver y luego la completó con otros dos golazos. No le pesó para nada reemplazar a CR7. Tampoco, que haya sido su primer partido de titular en una Copa del Mundo.

Una jornada que jamás olvidará: fue la estrella que opacó a la mega estrella.

Fuente: Olé
A cuartos
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