No resulta difícil dilucidar la compleja y debilitada situación socio-económica que está atravesando nuestro país. Es evidente distinguir las distintas consecuencias macroeconómicas que estamos transitando.

Las elecciones legislativas intermedias materializaron el descontento social ante un oficialismo sin balizamiento en materia de políticas públicas.

En el otro orden, el frente opositor se acercó más una retórica de diferenciación que, a realizar un aporte a los fines de zanjar los problemas estructurales o medulares que erosionan cualquier estabilidad política, económica, social y cultural.

Atendiendo a los aspectos económicos, se pueden resaltar algunas condiciones que se deja entrever ciertos pilares sólidos, y otras variables que, deben atenderse con premura.

Excluimos de este pequeño análisis aquellas directrices de mediano y largo plazo. En el plano de las dificultades a resolver de manera inmediata, se pueden destacar:

1. Inflación: El índice de inflación para el cierre del año se estima alrededor del 50 por ciento anual. Generar una política pública de contingencia para reducirla gradualmente

2. Tipo Cambio: Se debe converger a un tipo de cambio único, transparente y competitivo.

3. Salario Real: La masa salarial debe posicionarse por encima del valor de la tasa inflación.

4. Políticas Sociales: Profundizar las políticas de contención social, el abastecimiento de alimentos, la consolidación de ingresos mínimos.

5. FMI: Es de suma importancia lograr un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, que prevea una extensión del plazo de pago y una reducción de intereses.

6. Política Monetaria: Reducir gradualmente la Emisión Monetaria y concomitantemente resolver la deuda intra-BCRA (Leliqs)

El soporte o los amortiguadores de la economía actual (corto plazo), esta sustentada por los siguientes indicadores macroeconómicos.

1. Crecimiento del PBI: Se estima un crecimiento anual por encima del 9 por ciento.
2. Superávit de la Balanza Comercial: A septiembre de 2021, la balanza comercial arrojó un superávit de 12.323 millones de dólares.

3. Actividades Económicas Intensivas: El estimador mensual de la actividad económica se posiciona por encima del 10 por ciento de crecimiento interanual. Asimismo, hubo aumento de la capacidad instalada 67 por ciento en el sector industrial. La actividad de la construcción alcanzó un guarismo del 12,4 por ciento de variación positiva (i.a.).

4. Estabilidad en el Empleo: El Empleo se mantiene alrededor del 9,5 por ciento. Es dable destacar que, existe una tendencia de decrecimiento el desempleo.
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