El Consejo General de Educación (CGE) relevó de qué modo se llevó adelante el programa de educación a distancia en las escuelas de Entre Ríos, luego de que el 16 de marzo se dispusiera la suspensión de las clases presenciales producto de la pandemia de coronavirus.

El dato más relevante es la respuesta de los docentes en cuanto a las dificultades que hubo para mantener contacto con los alumnos derivado de los problemas de conectividad.

A eso, se suman los tropiezos también de los estudiantes para cumplir con las tareas: tampoco lograron buena conexión a Internet para poder intercambiar con sus docentes.

Luego de procesar los datos obtenidos, tarea que estuvo a cargo de la Coordinación de Evaluación e Investigación Educativa del CGE, las autoridades constataron que “las realidades en el territorio de la Provincia son diversas en cuanto a la disponibilidad de recursos, antecedentes de trabajo en la virtualidad, conectividad, acceso a soportes digitales desde los hogares, condiciones de vida y contextos de las familias y estudiantes. Muchas son las situaciones que se presentan como obstaculizadoras en el sostenimiento del vínculo entre la escuela, la familia y el estudiantado”.

Procesada la información que aportaron los docentes, se dibujó un mapa de lo que ocurrió en la primera fase de la educación a distancia: las opciones más frecuentes entre quienes tuvieron dificultades fueron, en orden descendente: la conectividad (73,41%), la falta de dominio de herramientas para trabajar en la modalidad (41,03%), escasez de recursos para trabajar en esta modalidad (35,13%).

El 3,95% de los respondientes afirmaron no haber tenido dificultades en la construcción de propuestas entre docentes.
Docentes
Ante la pregunta de la encuesta a cuáles fueron las dificultades más frecuentes que se presentaron para la construcción de las propuestas entre los y las docentes, los docentes hablaron de las dificultades para establecer acuerdos con sus propios pares, y fundamentalmente dificultades para elaborar “mediaciones que lleguen a todos los estudiantes que refiere a las dificultades u obstáculos para llegar a acuerdos respecto al uso de las mediaciones y/o qué mediaciones utilizar de acuerdo a las características del grupo de estudiantes y/o los recursos con los que cuentan; dificultad para trabajar en equipo relacionada con los obstáculos que aparecieron por la imposibilidad de organizar el trabajo en equipo entre docentes o por la falta de acuerdos entre los mismos; la conectividad, la cual se vincula a la disponibilidad de internet en los dispositivos tecnológicos (teléfono celular y computadora), para poder garantizar el trabajo en la virtualidad; escasez de recursos para trabajar en esta modalidad, que hace referencia, fundamentalmente, a la disponibilidad de los dispositivos tecnológicos necesarios para trabajar en la virtualidad: computadoras y teléfonos celulares; y por último falta de dominio de algunas herramientas para trabajar en la modalidad, relacionada al manejo escaso o insuficiente de las herramientas de trabajo necesarias para desenvolverse en la virtualidad y/o a distancia”.

Luego de la suspensión de las clases presenciales, Educación ha implementado distintos recursos para sostener el proceso educativo, como el programa Contenidos en Casa. Y para medir el impacto que tuvo esa estrategia, entre el 20 de abril y el 6 de mayo se llevó adelante una encuesta a equipos directivos y docentes para conocer cuáles fueron las dificultades, cómo se trabajó, qué se trabajó.

De un total de 4.174 unidades educativas que conforman el sistema en la provincia, 2.103 respondieron el formulario. O sea, contestó el 50,4% del total del sistema educativo. El 58,5% del nivel primario; el 20%, de secundaria; el 20,7% del nivel inicial; y 0,8% de nivel superior.

En qué lugares de la provincia se encontraron esas dificultades.

El sondeo del Consejo de Educación analizó las respuestas de docentes y concluyó que “las mayores dificultades siguen ubicándose en la conectividad, siendo los departamentos de Islas del Ibicuy, Federal y Villaguay” los que registran los porcentajes más alto en esta dificultad: 88%, 71,08% y 75,19% respectivamente.

En tanto para Concordia, Diamante, Federal, Gualeguay y Nogoyá el porcentaje de respuestas para esta dificultad alcanza porcentajes que rondan el 70%.

Para el resto de los departamentos esta opción está entre el 65% y el 68,57%.

La segunda dificultad más registrada corresponde a la falta de dominio de algunas herramientas para trabajar en la modalidad. En el departamento Gualeguaychú el 52,97% selecciona esta opción; en Concordia, el segundo departamento con mayor cantidad de respuestas en este ítem 45% selecciona ésta como una de las dificultades.

En tanto Victoria, La Paz, Tala y Colón superan el 40%. Para el resto de los departamentos esta opción representa entre el 31,43% y el 39,52%.

En cuanto a las dificultades vinculadas a la escasez de recursos para trabajar en esta modalidad, los porcentajes en los departamentos van desde un 28% (Islas del Ibicuy) al 40% (San Salvador). Sumadas al primero, Gualeguay, La Paz, Colón y Feliciano no superan el 30% en esta opción. Para el resto de los departamentos este rango va desde el 30,27% al 36,29%, haciendo este último aún más significativo el porcentaje obtenido en San Salvador.
¿Y los alumnos?
El sondeo de Educación indagó respecto a cuáles fueron los motivos que dificultaron el cumplimiento de la tarea por parte de los estudiantes.

“A la hora de realizar un primer análisis, se puede apreciar que la mayoría de las respuestas se concentran en tres ítems:

Los estudiantes no cuentan con conectividad, elegida por el 61,7% de los respondientes. No todos disponen de los medios para recibir y/o enviar los materiales y actividades por el 57,5%.

Las familias no cuentan con estrategias para acompañar a los estudiantes en este proceso que representa el 48,2%.

Si junto a este último se considera aquellos que manifestaron como motivo de dificultad que La familia acompaña escasamente la propuesta de actividades (9,8%) podemos hablar de dos motivos muy bien definidos: por un lado, aquellos que refieren a los recursos materiales y, por el otro, aquellos que se relacionan con las condiciones familiares necesarias para el trabajo en la modalidad.

Estas últimas en particular concentran sentidos relacionados a las pocas capacidades, la escasa formación, el interés y motivación de los padres, madres o tutores de los y las estudiantes que los actores institucionales entienden que dificultan el desarrollo de sus propuestas”, señala el informe oficial.

Fuente: Entre Ríos Ahora
Educación a distancia Asistencia social
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