El espacio pretende respetar el desarrollo individual de cada niño y niña, valorando sus procesos, tomando para ello como base miradas como la de Emmi Pikler y María Montessori, quienes reconocieron al niño como protagonista de su propio aprendizaje, donde las intervenciones del adulto son cuidadas, garantizando las condiciones de seguridad en un entorno con estímulos criteriosamente elegidos.
Para llevar a cabo estas propuestas, las salas se equiparon con mobiliario y materiales adecuados, que permiten la exploración y la libertad de movimiento favoreciendo la autonomía. Por otro lado, el equipo de educadoras se formó y continuará haciéndolo desde estas perspectivas.
Se recibirán a 25 familias, muchas de las cuales fueron parte del Jardín el año anterior, tanto en sala como en el Espacio de Juego y Movimiento Libre, que decidieron seguir confiando en el espacio para que asistan sus hijos.
En este año se organizó un esquema de días alternados, lo que posibilitó recibir mayor cantidad de familias en el espacio, respetando los límites establecidos para el funcionamiento de cada sala.
Esta estructuración se dio gracias al acuerdo y la solidaridad de las familias, que cedieron días según sus posibilidades para permitir que todos los niños y niñas que fueron inscriptos en el período estipulado para ello puedan ser recibidas en este espacio.
Además en este año se inaugurará una sala de lactancia, la primera en Pueblo Belgrano, que se denominará “Espacio Amigo de la Lactancia", en un trabajo conjunto con el CAPS. Carlos Artusi, que permitirá el amamantamiento, como así también la extracción, habilitando así un espacio que acompaña la continuidad de la lactancia durante la permanencia en el jardín.
