Durante su exposición, el funcionario estimó que la cosecha total de la actual campaña agrícola alcanzaría los 94.700.000 toneladas, un 30,9% de merma en relación a la campaña anterior, con las exportaciones que llegarían a 56 millones de toneladas, un 41% de merma en relación a 2022. Como consecuencia de todo esto, dejarán de ingresar al país 16.990 millones de dólares, pero si suman 3.000 millones de dólares por el impacto negativo en los fletes y el consumo de combustibles.
A todo esto, Juan José Bahillo agregó que el país perdió 5.080 millones de dólares por el ataque de Rusia a Ucrania, en un contexto donde reconoció que no se registraron circunstancias favorables para el comercio exterior, por el aumento de los costos de la energía, los fletes, y los fertilizantes, y todo esto no se tradujo en esa mejora de precios.
“Se pueden sostener los ingresos del Estado avanzando en un sistema gradual de disminución de retenciones, o sea, un sistema más progresivo en lo que es grabar la renta o el patrimonio, o en un incremental de producción”
“Todos sabemos que estamos viviendo una situación coyuntural, macroeconómica compleja y crítica, que no es mi tema directo ni mi responsabilidad directa y confío plenamente en el Ministro Sergio Massa y su equipo de trabajo para superar esta coyuntura, no tengo ninguna duda. Ahora, no debemos, los que tenemos la responsabilidad de generar políticas de producción, inmovilizarnos en estas cuestiones, y estar pensando en el mediano y el largo plazo para darle previsibilidad, se la debemos al sector desde hace muchísimos años”, dijo el Secretario de Agricultura.
En ese sentido, Bahillo señaló que “afortunadamente, este país tiene salida, no tengo ninguna duda, y que coincidimos en el objetivo de generar y que la salida es creciendo, es produciendo más, desarrollando más valor agregado en origen, desarrollando las economías regionales y con más exportación”.
Además, agregó que se puede pasar en pocos años de los 137 millones de toneladas a 200 millones de toneladas en producción de granos y oleaginosas. Para alcanzar dicha meta, planteó las medidas que se deberán tomar, como por ejemplo la sanción de la Ley de Desarrollo Agroindustria, que espera su tratamiento en la Cámara de Diputados, pero también una nueva Ley de Semillas, de arrendamientos, y de aumento del uso de los biocombustibles.
Retenciones
A esto, Bahillo sumo las medidas fiscales, entre las que mencionó a las retenciones. Al respecto, señaló: “Ya lo he dicho en otras oportunidades, tenemos que darnos un debate sobre lo que son los derechos de exportación. Quiero ser prudente, claro, y muy responsable, ese debate hay que hacerlo sosteniendo los ingresos que tiene el Estado. No hay atajos para esto y tenemos que ser muy responsables. Se pueden sostener los ingresos del Estado avanzando en un sistema gradual de disminución de retenciones, o sea, un sistema más progresivo en lo que es gravar la renta o el patrimonio, o en un incremental de producción”.
Y agregó: “Tenemos que trabajar sobre las economías regionales. Este Gobierno prácticamente eliminó la mayoría de las retenciones que tienen las economías regionales. Hay algunas que tienen y todavía son muy pocas y no tienen un costo fiscal muy alto, no exceden los 140 millones de dólares. Hay que encontrar el momento, obviamente. Hay responsabilidad de mi parte plantearlo ahora, pero no tengo ninguna duda de que podemos avanzar en una previsibilidad macroeconómica”.
Además, el Secretario mencionó como políticas a implementar para aumentar las hectáreas bajo el sistema de riego, para aumentar la producción de carne y el stock vacuno, y la producción y consumo de fertilizantes, publicó Infobae.
A partir de la aplicación de las mencionadas medidas, que forman parte de un Plan que diseñó la Secretaría de Agricultura, Juan José Bahillo proyectó que “podemos pasar tranquilamente de 40.000 millones de dólares de exportación del sector primario y agroindustrial a 85.000 millones de dólares”.
En el desagregado, se estima que la mejora de las exportaciones se registraría por una mayor producción de granos, que podría llegar a los 200 millones de toneladas. A esto se suman unos 10.000 millones de dólares de mejoras en las economías regionales, 3 mil millones de dólares anuales en forestación, 8 mil millones de dólares anuales de la mano de la industria aceitera y de biocombustibles, y la transformación de proteína vegetal en proteína animal, puede sumar unos 7 mil millones de dólares anuales.
“Es nuestra obligación generar programas y proyectos creíbles y que esos programas y proyectos creíbles con números tangibles y demostrables, también lo acompañen dirigentes de la política que sean confiables”, comentó el Secretario de Agricultura, quien además molesto por algunas declaraciones de los últimos días desde varios sectores, agregó: “Estamos escuchando lamentablemente en estas últimas semanas un vocabulario que no se corresponde con una pirotecnia verbal, que no se corresponde con la responsabilidad que tenemos, al menos nosotros como dirigentes, de llevarle en estos momentos de incertidumbre, que pueden tener muchos sectores, de angustia como tienen los productores”.
Fuente: APF