La especialista en salto en alto dijo que no se trataba de lesiones graves, sino de procedimientos sencillos. “El 13 de enero me operaron como última cirugía pactada, donde me tenían que limpiar una fibrosis, y a los 20 días podía volverme al CeNARD (Centro Nacional de Alto Rendimiento Deportivo) y entrenar. Al parecer, en la cirugía o los días posteriores a ella, me ingresó una bacteria que complicó todo”, relató Páez, que además se encuentra aislada tras dar positivo de coronavirus.
“Se me hizo una infección en la pierna, a punto de hacerme una septicemia, que es una infección generalizada en la sangre que puede llevar a la muerte. Fue ahí que me tuvieron que intervenir de urgencia para frenar eso. Al ser una bacteria que te va comiendo tejidos tendones, huesos, ligamento, etc., la estamos peleando con medicamentos”, contó la joven que representó al país en los Juegos Olímpicos de la Juventud Singapur 2010.
La situación de Bestabé, además de ser compleja por su infección, se hizo más dificultosa por no tener cobertura social. Eso hizo que pagara todos los gastos de sus operaciones de manera particular, con todo lo que ello implica. Ante este panorama, la comunidad crespense se movilizó para recaudar fondos destinados a su tratamiento.
“Al no tener obra social, ya que me dieron de baja la del ENARD (Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo) por atleta, tuve que pagar todo de forma privada. Llegué a un hospital privado debido a que los médicos que estaban en el tratamiento se encontraban trabajando acá. Ahora estoy en un hospital público, donde me están dando los medicamentos necesarios. Cuando salga tendré que seguir con un tratamiento ambulatorio”, contó. Y agregó: “Por ello se debe esta movida social, que desde ya agradezco a todos los que se están sumando y apoyando de una u otra forma en estos momentos”.
Su internación
La crespense, además, contó que había comenzado la semana con normalidad con su rutina de entrenamientos. “El lunes entrené e hice vida normal, como venía realizando; el martes me levanté con molestias, que a medida que fueron pasando las horas se iban agudizando, hasta que a la madrugada sentía paralizado todo el cuerpo, se me bajó la presión y fue ahí cuando mi kinesiólogo, a las 6, me derivó de urgencia al hospital”, recordó en diálogo con 147 Sport.
“Sin fuerzas y sintiendo una parálisis importante, me logré vestir y salir para tomar un taxi que me llevó al nosocomio. En el lugar ya me estaba esperando el médico, me ingresaron a un box para realizarme una punción para sacar la hemorragia en la pierna. Luego me hicieron estudios para descartar otras patologías. Fue una situación muy complicada”, concluyó la atleta surgida de la Escuela Municipal de Crespo.
