La Premio Nobel del Medio Ambiente 2025 certifica denuncias de Luciano
Vamos a nuestro tema, vengo denunciado desde bastante tiempo atrás que las areneras y plantas de lavado de arena del sur de nuestra provincia que: “Se están llevando en camión (aproximados 500 diarios de 40 toneladas de carga) un ecosistema que la naturaleza formó durante miles de años” y consumen alrededor de 550 millones de litros mensuales de agua subterránea potable, destruyendo el frágil ecosistema de la zona.
Pues bien, no sólo la ONU denuncia lo mismo, sino que ahora la ganadora del Premio Nobel de Medio Ambiente, la doctora Sandra Díaz, investigadora superior y ecóloga del Conicet, ganó el Premio Tyler al Logro Ambiental.
Sus investigaciones demostraron que la relación entre los seres humanos y el resto de las especies del planeta es más estrecha de lo que se creía.
Con sus investigaciones, la científica argentina Sandra Díaz llevó a replantear el paradigma sobre qué es la biodiversidad y por qué vale la pena cuidarla. “No es solo un conjunto de seres vivos”, dijo.
Sobre qué es la biodiversidad manifestó que “es el tapiz entretejido de la vida misma, que sostiene el funcionamiento del planeta y, en última instancia, nuestro bienestar”, explicó en diálogo con Infobae.
Ahora, junto con el antropólogo brasileño-estadounidense Eduardo Brondízio, la doctora Díaz fue destacada con el Premio Tyler en los Estados Unidos por su “compromiso con la comprensión y abordaje de la pérdida de biodiversidad y su impacto en las sociedades humanas”. El jurado consideró que sus investigaciones fueron cruciales para redefinir la biodiversidad en las discusiones políticas globales y visibilizar la interdependencia entre naturaleza y humanidad.
Las pruebas científicas demuestran que los humanos están interconectados con otras formas de vida en la Tierra. “Estamos unidos a otros seres vivos por un ancestro común: compartimos muchos genes y procesos fisiológicos. También estamos conectados a través de procesos ecológicos: intercambiamos materiales con otros seres vivos continuamente”, señaló Díaz.
Otro concepto que Díaz desarrolló en sus trabajos es el de “diversidad funcional”. No consiste solo en considerar el número de especies sino en comprender cómo interactúan con su entorno y cómo afectan al resto del tejido vivo. (…)
Su trabajo permitió probar cómo la biodiversidad es esencial no solo para el funcionamiento del planeta, sino también para el bienestar humano.
“La investigación de Eduardo Brondízio ha iluminado el papel vital de los pueblos indígenas y las comunidades locales en la conservación, mientras que el trabajo de Sandra Díaz ha sido fundamental para redefinir cómo se conceptualiza y valora la biodiversidad en las discusiones políticas en todo el mundo”, declaró Julia Marton-Lefèvre, presidenta del Premio Tyler.
La ceremonia de entrega se llevará a cabo el 10 de abril en Los Ángeles, donde se formalizará la entrega de los 250.000 dólares del premio compartido
Uno de los últimos hallazgos de la doctora Díaz fue la identificación de una nueva dimensión para abordar la crisis de biodiversidad: la vulnerabilidad biocultural.(…)
Lo publicaron en la revista PNAS de la Academia Nacional de Ciencias de los Estados Unidos. Desarrollaron una métrica de “estatus biocultural” que combina el riesgo de extinción biológica de una especie con el grado de amenaza que enfrenta la cultura que la considera importante.(…)
El estudio identificó 385 especies silvestres culturalmente significativas, en su mayoría plantas. Más de la mitad (57%) eran importantes para pueblos indígenas, mientras que un 21% lo era para otros grupos étnicos.
Sin embargo, los datos mostraron que muchas de estas especies tienen un estatus de conservación incierto, con un 41% clasificadas como “Deficientes en Datos” en la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (IUCN), en contraste con solo un 12% de especies en general.
“Eso indica que los esfuerzos de conservación suelen no prestar atención a las especies que son fundamentales para las culturas locales”, comentó Díaz. El estudio propuso un cambio de paradigma en la conservación: dejar de tratar la biodiversidad y la cultura como elementos separados.
“Para sostener las especies culturalmente importantes, necesitamos una lista más completa de especies y de su estatus, así como un mayor apoyo a las culturas que las valoran”, afirmaron. (…)
“La conexión deliberada entre valores biológicos y culturales aporta una forma concreta de orientar decisiones y operacionalizar acciones globales”, expresaron. Advirtieron que la desaparición de las culturas tradicionales puede ser un factor tan letal como la deforestación o el cambio climático.
Nuestro planeta alberga una gran variedad de seres vivos que responden a los diferentes ecosistemas sus particulares condiciones climáticas y geográficas. Existen hábitats acuáticos, aéreos y terrestres, a los que estos seres vivos han logrado adaptarse.
Definición de biodiversidad
La biodiversidad es la variedad de especies vivas que se encuentran sobre la tierra. Estas especies comprenden a todos los grupos taxonómicos: bacterias, protozoarios, algas, invertebrados, hongos, plantas y animales.
Nuestro planeta alberga una gran variedad de seres vivos que responden a los diferentes ecosistemas sus particulares condiciones climáticas y geográficas. Existen hábitats acuáticos, aéreos y terrestres, a los que estos seres vivos han logrado adaptarse.
Dentro de los tipos de biodiversidades encontramos: Biodiversidad de ecosistemas: es la variedad que puede haber en los ecosistemas y de las relaciones de seres vivos entre ellos y con su entorno.
A lo expuesto digo: Como la realidad, la ONU (Informe V), estudios científicos avalan lo que vengo denunciado sólo les queda matar al mensajero, haciendo denuncias cobardes entre cuatro paredes y no llevándolas a la justicia como todo funcionario público debe hacer.
El autor es abogado, docente UCU e integrante del Instituto de Derecho Ambiental Colegio de Abogacía de Entre Ríos.