Fuentes del Servicio Penitenciario indicaron a R2820 que "inmediatamente se activó el protocolo luego de constatar síntomas compatibles con el padecimiento de COVID-19: temperatura alta, dolor muscular y de garganta".
El hombre "fue ingresado por el consultorio de febriles del Hospital Centenario, donde fue hisopado. Luego permanecerá aislado de manera preventiva dentro de la escuela de la unidad carcelaria, espacio que ha sido acondicionado para tales fines. Se aguarda el resultado de la muestra para dentro de 72 horas", explicaron a este portal.
El interno -que hasta hoy convivió en un pabellón en el que se alojan alrededor de 11 personas- está bajo la órbita de control del Juzgado de Ejecución de Penas a cargo del Dr. Carlos Rossi y es el segundo preso de la Unidad Penal 2 hisopado en un período de 10 días.
El primero de los internos considerado sospechoso, por el cual se activó la correspondiente aplicación del protocolo de COVID dentro de la cárcel gualeguaychuense, fue confirmado como positivo el último 8 de enero. Debido a que habitaba un pabellón reducido, se pudo implementar sin mayores inconvenientes el aislamiento de sus compañeros.
Pero desde aquel momento hasta la fecha, Provincia no implementó medidas restrictivas en los penales que sean acordes con la situación epidemiológica que vive una ciudad que en los últimos días se ha visto en la necesidad de trasladar pacientes a unidades de Terapia Intensiva de otras localidades por la falta de disposición de camas. De más está decir que, los internos alojados en las unidades penales de Gualeguaychú dependen del mismo servicio sanitario que anuncia la inminencia de su colapso desde hace días.
Las visitas familiares, autorizadas por el Ministerio de Gobierno y Justicia de la Provincia desde noviembre pasado, bajo la anuencia de los jueces de Ejecución de Penas a cargo del control de los internos, continúan pese al contexto sanitario y la recomendación de las autoridades sanitarias y políticas a los vecinos de implementar el auto aislamiento y la convivencia en burbuja para evitar la propagación del virus.
"Sin la circulación de personas el virus no circula", dicen hasta el hartazgo los expertos. Pero las autoridades correspondientes ni siquiera consideran profundizar en otras alternativas que no impliquen el contacto y visita de familiares en el marco de las medidas restrictivas que rigen para toda la población de Gualeguaychú en materia sanitaria.
