En varios frentes simultáneos se trabaja en el Corsódromo a fin de alistarlo para la primera noche de la edición 2024 del Carnaval de País. Si bien aún faltan algunos días, lo que se percibe como más preocupante es el estado de la pasarela José Luis Gestro.
En el lateral oeste del Corsódromo, se realizaron intervenciones sobre el cantero central de la avenida Estrada quitando los cordones para facilitar el desplazamiento de las carrozas de las comparsas, se trabajó sobre el nuevo portal -que está sin terminar con estructuras de hierro y chapa en el piso a la espera de su colocación- y se lo movió unos centímetros además de inflar las cubiertas.
Recordemos que la semana anterior, la presidente de la Comisión del Carnaval, Victoria Giménez, alertó que por su tamaño el portal podría dificultar el desplazamiento de las ambulancias en caso de emergencias durante una noche. Al respecto contó que, usualmente, las unidades se mueven en una U del sector sur al norte del predio y el pasaje de un lado al otro es, justamente, por donde está el portal de acceso.

En estos días, se evaluó que la ambulancia pasaría bien por esa calle interna entre el final de la pasarela y el portal de acceso. De esa manera, la situación estaría encaminada.
Siguiendo con la puesta a punto del Corsódromo, otras actividades tienen que ver con el parquizado del predio, el alistamiento de las cantinas, la limpieza y adecuación de los baños y el montaje de los playones en las punteras con las barras y mesas.

Sobre la pasarela, se realiza el recambio de las luminarias con personal municipal. Aún faltaba terminar ese proceso, tanto en el sector de apertura como en el de cierre donde siguen montados los faroles alógenos. En el centro del Corsódromo se colocó un par de plafones led de mediano tamaño y otros tres más pequeños con una especie de filtro lumínico.
Este cambio sería una respuesta de la Comisión a las críticas recibidas en la edición del año pasado cuando las distintas tonalidades de luz fue marcada tanto por los realizadores como por los integrantes de la puesta en escena porque alteraban la estética de los trajes.

Por otra parte, se renovaron tablones en los sectores vip y se montaron las estructuras para la presencia del público. En la planta alta y sobre el ala este de la Casa Rosada se instala la consola central de sonido y aún falta el montaje de los parlantes en las columnas, como también las pantallas led y la iluminación robótica.
La pasarela ya tiene las vallas de chapa que esperan por el ploteo de marcas, pero el estado general del asfalto se ve deteriorado en algunos sectores. Le falta un hidrolavado, pintura y arreglos generales para facilitar el desplazamiento de los integrantes de las comparsas. Se estima de parte de los trabajadores que será una de las últimas acciones que se encararán en la semana para que quede perfecta para el desfile.
En el exterior, resta montar los molinetes y concluir los puestos de ventas. En tanto, dentro de la Casa Rosada, el espacio para la oficina de prensa no tiene ni una silla. Pero el ritmo de trabajo a lo largo de las cinco cuadras es frenético con la meta de lograr que el sábado pueda concretarse la primera noche de Carnaval como el público merece.
Los preparativos
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