En el fútbol profesional de Argentina, en Primera División, han sido sólo 7 los jugadores que lograron la hazaña, además de algunos en el ascenso y, el de Diego Torres (Arsenal), que atajó uno en Copa Libertadores.
Los torneos de la Liga Departamental también tienen algunos casos, el último de ellos en el torneo Clausura de 2009.
Juventud Urdinarrain y Sporting igualaron 3 a 3 en la vecina localidad, el 8 de noviembre, un partido correspondiente a la última fecha de la fase clasificatoria.
El dueño de casa se adelantó con un gol olímpico de Carlos Godoy, sorprendiendo a Pablo Apollonia, cuando transcurrían 10’ y a los 55’ Marcelo Ghibaudo puso el segundo, de cabeza.
Con un gran tiro libre, Daniel Aguilar acortó distancias, a los 65’ y enseguida Carlos Godoy anotó el tercero.
Esteban Bogliacino, pasada la media hora, achicó la diferencia y, sobre los 82’ una avivada de Daniel Aguilar, a la salida de un tiro libre, dejó sólo a Norberto Rossi, que estampó el inesperado 3 a 3.
Iban 40 minutos del complemento y llegaría una nueva posibilidad para Juventud, para poner justeza en el marcador. Falta fuerte dentro del área del arquero Apollonia sobre Rodrigo Legaria que el árbitro Miguel Rodríguez no dudó en sancionar penal y determinó la expulsión del arquero.
Como Juan Carlos Aguilar, técnico de Sporting había hecho los tres cambios, Robertino Morales se puso el buzo de su compañero y se calzó los guantes en el arco que da espaldas a la ruta nacional 20.
Carlos Godoy se encargó de ejecutarlo y su remate al palo izquierdo lo detuvo el defensor “canario”, al mejor estilo de Apollonia, transformándose en el “héroe” de su equipo.
Fue el último antecedente que se registra en partidos de la Liga Departamental de Gualeguaychú, pero a nivel nacional, desde que se instauró el profesionalismo, hay siete casos.
Pero la curiosidad no termina allí. El mismo futbolista repitió la hazaña cinco años más tarde, pero el fútbol de Posadas, cuando jugó una temporada por Jorge Gibson Brown.
Como el equipo principal que estaba jugando el Federal B no tenía actividad el fin de semana, el técnico Carlos Giménez hizo jugar a varios de los titulares en el torneo de la Liga Posadeña en la formación que enfrentaba a Huracán, en cancha de éstos, el 17 de mayo de 2014.
Ganaba Brown 1 a 0, cuando sobre el final el arquero Horacio Galeano choca con un delantero del Globo, quien cae al piso aduciendo una agresión, que interpretó de la misma manera del árbitro Santiago Gómez, quien le mostró la tarjeta roja a Galeano.
Era la gran oportunidad para empatar. Esta vez, Robertino debió convencer a su compañero Guido Barreyro para que lo dejara ocupar el arco verdirrojo, ya que el espigado delantero quería hacerlo.
Tomó el buzo, se puso los guantes de Galeano y se plantó ante el delantero Guillermo Aguirre, quien remató fuerte, al palo derecho.
Robertino voló y alcanzó a desviar el disparo. La pelota chocó contra el poste y le volvió a quedar a Aguirre, quien la quiso colocar al otro palo, con la mala fortuna de elevar el remate.
Ganó Brown y se convirtió así en el primer semifinalista del torneo Apertura de la Liga Posadeña de Fútbol.
Fue festejo de jugadores e hinchas, por la trabajosa victoria lograda con el plus del curioso episodio que había repetido el entrerriano, quien es dueño de un récord que seguramente no tiene muchos precedentes en el fútbol del interior.
La historia continuó. En semifinales, Brown enfrentó a Candelaria y, en el partido de vuelta, el portero Matías Kluge cometió un penal y fue sancionado con tarjeta roja. Quién fue al arco?
Adivinó. Otra vez Robertino Morales, salvo que esta vez no tuvo la misma fortuna anterior y Adrián Alegre, delantero que jugó por Crucero del Norte en Primera A, anotó el tanto con el cual Candelaria avanzó a la final.
La hazaña de Ocampos
No fue un penal pero casi... En el último minuto de descuento, Lucas Ocampos, ya en su rol de improvisado arquero por la lesión de Tomas Vaclik y ante la imposibilidad de efectuar de cambios, le desvió el remate a Marko Dmitrovic, el arquero del Eibar, quien había cruzado toda la cancha con la intención de empatar el partido. El Sevilla ganó y el delantero argentino fue el héroe, autor del 1-0 y clave al sostener el triunfo sobre el final.Y hablando de argentinos que alguna vez se calzaron los guantes pero en nuestro fútbol, hubo siete futbolistas que se destacaron por haberse dado el lujo de atajar un penal. Un plus que los dejó en la historia.
La selecta lista
1) Julio Nuín. Defensor de River en la década del 50 y pateador de penales. En el año 1959, en un partido ante Atlanta disputado en la cancha de Huracán el 27 de septiembre, el árbitro expulsó a Amadeo Carrizo por agredirse con Alberto Dezorzi, un rival, y cobró penal. Nuín fue al arco y se lo atajó a Norberto Desanzo. Quedó en la historia como el primer jugador en atajar un penal en el fútbol argentino. Luego, Mario Griguol marcó el 1-0 final para Atlanta.2) Iselín Santos Ovejero. El 4 de mayo de 1969, este defensor de Vélez fue a ocupar el arco a los diez minutos del segundo tiempo luego de que el árbitro Barreiro expulsara a Miguel Marín, el arquero de su equipo. El rival era Gimnasia La Plata. A los 85 minutos, sobre el final, hubo penal para el Lobo. Lo pateó Delio Onnis y Ovejero lo atajó. Ganó Vélez por 3 a 0.
3) Juan Carlos Cárdenas. El 22 de agosto de 1971, en el Gigante de Arroyito, Racing le ganaba Rosario Central cuando hubo un penal para el local. Guibaudo se lo atajó a Landucci pero fue amonestado por adelantarse. En la repetición volvió a atajarlo pero otra vez se adelantó por lo que vio la roja. Por ese motivo, el Chango fue el que eligió ocupar el arco. Faltando 15 minutos, otra vez penal para Central. El encargado de ejecutarlo en esa ocasión fue Roberto Gramajo. Cárdenas se tiró a su izquierda y desvió el remate. Ganó Racing por 2 a 1.
4) Oscar López Turitich. El 22 de abril de 1984, en un partido entre Platense y Boca en la cancha de Vélez, se produjo otro hecho histórico. A los 30 minutos del segundo tiempo, Gabriel Puentedura, arquero del Calamar, se retiró lesionado y como su equipo había agotado los cambios, López Turitich fue al arco. Boca ganaba 2-0 y tenía un jugador más pero Platense se lo empató. Faltando dos minutos para el pitazo final, el árbitro Juan Carlos Demaro cobró un penal para el Xeneize. El goleador uruguayo Fernando Morena, que ya había convertido uno de penal, se encargó de la ejecución y López Turitich le adivinó el remate y se lo atajó. Platense festejó el empate con nueve por la roja a Godoy en el final.
5) David Bisconti. El 19 de abril de 1992, Central perdía 3-0 con Platense en Vicente López y el 10 del Canalla se puso los guantes para reemplazar a Roberto Bonano, expulsado cuando faltaban menos de diez minutos para el final. Dos minutos después hubo penal para el local y Bisconti se lo atajó a Darío Scotto, quien un rato antes había convertido su gol desde los 12 pasos pero ante Bonano.
6) Agustín Pelletieri. El 3 de septiembre del 2012, el ex volante de Lanús se convirtió en el segundo jugador de campo de Racing en atajar un penal en la historia del club. Pelle fue al arco a los 88' por la expulsión de Jorge De Olivera. En el minuto 90 le contuvo el disparo a Gastón Caprari, de San Martín de San Juan. Racing goleó 3 a 0.
7) Adrián Bastía. El 26 de septiembre del 2015, el Polaco Bastía se sumó a la lista de jugadores que atajaron penales al contener el remate de Claudio Riaño cuando se jugaba tiempo de descuento del partido entre Atlético Rafaela y Unión. Bastía había ocupado el arco en los últimos minutos por la expulsión del arquero De Giorgi.
Otros futbolistas también quedaron en la historia por atajar penales en el fútbol argentino aunque en las categorías del Ascenso, como el caso de Tello, de Almirante Brown.
Además, Diego Torres, jugando para Arsenal, quedó en la historia al ser el primer jugador argentino en atajar un penal en la Copa Libertadores 2012: fue a Thiago Neves, de Fluminense.
Fuente: Gualeguaychú Deportivo.
